Desde su conformación la DDG ha establecido como un eje fundamental de su trabajo la realización de investigación respecto de temáticas de igualdad de género e inclusión de diversidades en general y particularmente en carreras de las ciencias, tecnologías, ingenierías y matemáticas (STEM de su sigla en inglés). Este énfasis se basa en que la transformación cultural para el logro de la igualdad de género y para la inclusión de diversidades requiere del diseño de políticas e intervenciones basadas en evidencia, centradas en entender los mecanismos específicos de exclusión que pudiesen estar en funcionamiento y atingentes a la realidad específica de las culturas locales.
El desafío es grande. Primero, requiere atender a distintas diversidades o grupos que han sido históricamente marginados de las carreras STEM (por ejemplo, mujeres, diversidades sexuales, personas en situación de discapacidad, etnias, pueblos originarios, etc.). Las razones por las cuales estos distintos grupos se han mantenido relativamente excluidos de carreras en el área STEM son muy diferentes, por lo que requieren distintas aproximaciones. Además, los mecanismos de exclusión tienen un efecto sumativo a lo largo de la carrera y reproductivo. Sumativo se refiere a lo que ha sido denominado “fuga en la tubería” o cómo a lo largo de la carrera académica la representación de mujeres baja. Este problema es reproductivo ya que la menor presencia de mujeres en etapas avanzadas de la carrera genera problemas para la promoción de participación en etapas iniciales: ausencia de modelos de rol, reproducción de imágenes de las carreras como masculinas, ausencia de proyectos y políticas que respondan a intereses y necesidades más comunes en mujeres, por nombrar algunos.
Por último, al hablar de áreas STEM estamos hablando de un conjunto muy heterogéneo de disciplinas que funcionan con distintas culturas, valoran distintas competencias y, por tanto, pueden presentar distintos desafíos para la inclusión.